“La paz no es para un solo grupo, es para todos. Es para los pueblos” Así fue introducida la presentación de los muchos participantes del Quinto encuentro de Constructores y Constructoras de Paz y Reconciliación que acogió la comunidad de Taniperla del 10 al 13 de noviembre del 2009. Casi 600 personas, llegando de 17 municipios y de organizaciones sociales muy distintas, se apropiaron el espacio propuesto y convocado desde hace cinco años por la Comisión de Apoyo a la Unidad y Reconciliación Comunitaria (CORECO). Además de una participación creciente en lo general (de 27 personas en el 2005 a 572 este año) cabe destacar la creciente participación de las mujeres que representaron la tercera parte de los presentes este año y hicieron escuchar su voz tanto como los hombres.
Fueron tres días intensos para “ reflexionar y analizar los conflictos que vivimos en las comunidades, buscar alternativas, construir un solo corazón y un camino para la comunidad para encontrar nuestra propia fuerza”. Pero también fueron tres días de convivencia en un espíritu de hermandad con celebraciones alrededor de un espectacular altar maya.
Después de compartir los esfuerzos de construcción de paz del año pasado por regiones , los participantes se repartieron entre 10 mesas de trabajo abarcando los efectos de la migración, del alcoholismo y de la drogadicción; los derechos de la mujer y el trabajar con hombres; los conflictos entre organizaciones y partidos políticos y la resistencia a programas de gobierno ; las problemáticas de tierra, territorio y autonomía, del cultivo del maíz, de las tradiciones y del diálogo entre religiones.
En esta ocasión, Felipe Toussaint, director de la CORECO propuso un análisis de la realidad (ilustrado en vivo) según el cual el sistema capitalista aplastó la visión maya del universo. Encima de los cuatro cuidadores del mundo, el capitalismo puso los cuatro pilares que le permiten sostenerse a fuerza: el control de la política, de la economía, de la ideología y el énfasis en la seguridad. En el centro, donde la cosmovisión maya pone el cielo, la tierra, el hombre y la mujer para cuidarlos, el sistema capitalista puso la acumulación de la riqueza y la propiedad privada de los medios de producción. Felipe Toussaint explicó la violencia con la cual se impuso y se mantiene el sistema capitalista. Por eso frente a la crisis actual no invitó a buscar como superarla sino más bien animó a todos los constructores y constructoras de paz a construir otro mundo. Con respeto a las diferencias y sin violencia.
Entonces, los 600 participantes se juntaron otra vez por región para pensar en iniciativas de paz para el año que viene y comprometerse juntos. Por fin, ante la riqueza constructiva del encuentro, se decidió repetirlo una sexta vez: del 9 al 12 de noviembre de 2010, en la Región Estrella, Ocosingo.
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